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PES Avanzado 012 – Semana Santa

Valeria y Santiago hablan de la celebración de la Semana Santa en Sevilla y en Calanda (España), en Iztapalapa (en el Distrito Federal, México) y en Maryland (Estados Unidos).

Ramón quiere invitar a Irene a salir pero cree que debe ir poco a poco.  Comenta el asunto con una amiga, Ana. Aviso: este podcast contiene una expresión coloquial de contenido sexual y algunos sorprendentes pronombres de objeto directo.


La tortilla de patata

La tortilla de patata es uno de los platos clásicos españoles. Tiene pocos ingredientes, se prepara en poco más de una hora y la receta es relativamente sencilla aunque hay un paso que resulta, vamos a decir, emocionante.  Enseguida  les contamos por qué.

La tortilla de patata se prepara en una sartén, para cuatro personas necesitarán una de unos 27 centímetros de diámetro. Ingredientes: un kilo de patatas, una cebolla grande, ¾ de litro de aceite de oliva y sal. El único debate aceptable sobre los ingredientes es si la tortilla debe llevar cebolla o  no. La verdad es que para mí no hay debate posible. Si una tortilla no lleva cebolla, no como. Otra advertencia: si alguien lo invita a comer una tortilla de patata que lleve chorizo, pimiento o cualquier otra ocurrencia, salgan ustedes corriendo de esa casa y no vuelvan nunca. Además, si el anfitrión les dice que el aceite no es de oliva, insúltenlo antes de  salir por pies.

Se pelan las patatas y se cortan en forma más o menos circular de unos tres centímetros de diámetro y bastantes finas, aunque  no transparentes. Se reservan en un par de platos. Pelen la cebolla y córtenla en trocitos muy pequeños, casi transparentes. Mezclen la cebolla con la patata y añadan la sal. Pongan el aceite a calentar en la sartén a fuego bastante fuerte (el número siete en una escala de cero a diez). Cuando el aceite esté muy caliente echen todo en la sartén. ¡Cuidado porque el aceite hirviendo puede salpicarles!

En un bol grande se baten seis huevos un buen rato. Se pone sal y se reserva. De vez en cuando, con una rasera, denle vuelta a las patatas y a la cebolla en la sartén. En unos quince o veinte minutos la patata estará frita. Saquen la mezcla con la rasera, escurran el aceite y pónganla en el bol con el huevo batido. Echen el aceite en otra sartén y guárdenlo porque podrán usarlo en el futuro para dos o tres tortillas más. En nuestra sartén dejen un poquito de aceite para que la mezcla que van a echar no se pegue.

En el bol están bien mezclados la patata,  la cebolla y el huevo. Pueden probar una patata para añadir más sal si es necesario. La sartén con el poquito de aceite ya está bien caliente otra vez, (a fuego lento, entre tres y cuatro). Echen entonces el contenido del bol en la sartén y muévanla constantemente para que la masa no se pegue. Después de unos cuatro o cinco minutos hay que darle la vuelta a la tortilla. Este es el paso “emocionante”. Coloquen sobre la sartén un plato al menos de igual diámetro y sujétenlo con la palma de la mano derecha (si son diestros). Con la mano izquierda tomen la sartén por el mango y vuélquenla en el plato. Si todo ha ido bien la tortilla estará en el plato, en  su mano derecha, y no en el suelo de la cocina. Pongan otro poco de aceite en la sartén y cuando esté caliente echen la tortilla para que se haga por el otro lado. En cuatro cinco minutos estará hecha. Tomen un plato  limpio  y pónganla allí de la manera ya explicada.

Hay que esperar diez o quince minutos para que la tortilla cuaje. Sírvanla caliente aunque la tortilla fría también está riquísima. Se puede acompañar de ensalada (en otro plato). No olviden pan, vino, buena compañía. ¡Buen provecho!

Dos avisos:

  1. Este artículo se publicó como nota cultural en la guía del podcast PES INTERMEDIATE  005 – El subjuntivo, la maestra y el estudiante
  2. Pueden encontrar esta receta también en el podcast La tortilla de patata y el guacamole

Definiciones y ejemplos de uso

Pronombres de objeto directo y matrimonio

Nota: El diálogo que van a leer pueden oírlo en PES (Podcast En Spanish) Upper Beginner 005 –  Pronombres de objeto directo y matrimonio  El ejercicio que hay al final de este diálogo forma parte del cuaderno de ejercicios del podcast.

 Sinopsis: Ana y Miguel, un matrimonio de varios años, tienen una discusión. ¿Habrá reconciliación?

 

Ana: Miguel, ¿pagaste tus auriculares con la tarjeta familiar?

Miguel: No, no,  los pagué con mi tarjeta, ¿por?

Ana: Según el estado de cuenta del banco los pagaste con nuestra tarjeta.

Miguel: Ah, perdón, creía que los había pagado con la mía.

Ana: Oye, llamó tu mamá. Quiere saber si la vamos a llevar al cine el domingo.

Miguel: Podemos llevarla con los niños a ver una tolerada, aunque luego se queja del olor de las palomitas.

Ana: Por cierto, ¿sacaste la basura anoche? Huele un poco raro.

Miguel: No, no la saqué. La sacaré luego, ¿vale?

Ana: ¿Puedes sacarla ahora, por favor?

Miguel: La puedo sacar ahora pero ya no hay bolsas de basura. Esta mañana no has comprado bolsas de basura.

Ana: No las compré en el súper pero luego bajé a la tiendita y las compré allí.

Miguel: Pues yo no las he visto.

Ana: Las tienes en la despensa, delante de tus narices.  

Miguel: … Oye, Ana, ¿tú todavía me respetas? ¿Me sigues respetando después de tantos años?

Ana: Claro que sigo respetándote.

Miguel: Y ahora la pregunta del millón, ¿todavía me quieres?

Ana: No, no te quiero. Yo quiero a mi perro. A ti te amo. ¿Tú me amas?

Miguel: No, no te amo. Yo amo a mi perro, a ti te quiero…, no, es broma, ¿eh?, claro que te amo.

Ana: Chistosito, ¿a qué hora recoges a los niños?

Miguel: Los voy a recoger a las cinco, ¿por?

Ana: Tenemos tiempo para una siesta.

Miguel: Ah,  ¿y la basura? ¿La saco o no la saco?

Ana: Como dijo el otro, la basura la sacaremos luego. 

 

Ejercicio: Subraye los pronombres de objeto directo del diálogo.  Respuestas

 

 

Entonces, ¿ya te cayó el veinte?

Nota: El diálogo que van a leer pueden oírlo en PES (Podcast En Spanish) Upper Beginner 004 – Entonces, ¿ya te cayó el veinte?    Las definiciones con ejemplos de uso y los ejercicios que hay al final del diálogo forman parte del cuaderno de ejercicios del podcast.

Sinopsis: José habla con una terapeuta porque su esposa quiere el divorcio y él no termina de aceptarlo.

Doctora: Mucho gusto, José. Siéntese.

José: Hola, doctora. Es la primera vez que estoy en terapia, pero no vengo por mí, ¿eh?, es por un amigo.

Doctora: Ah, un amigo. ¿Y qué le pasa a su amigo?

 José: Su mujer se quiere divorciar porque se ha enamorado de otro. 

Doctora: ¿Cuánto hace de esto?

José: Se fue de casa hace seis meses. Menos mal que no tienen hijos.

Doctora: ¿Y cómo está su amigo?

José: Muy deprimido. No quiere ver a nadie. Va de casa al trabajo y del trabajo a casa, eso es todo.

Doctora: ¿Cómo se sintió su amigo cuando se marchó su esposa?

José: No lo aceptó. Trató de hablar con su mujer durante varias semanas pero ella no accedió.

Doctora: ¿Y después?

José: Le dio una rabia tremenda. Una noche rompió todas las fotos de ella que había por la casa.

Doctora: ¿Su amigo es creyente?

José: No, es agnóstico, ateo, no sé. ¿Por qué lo pregunta?

Doctora: ¿Rezó un poco?

José: Trató, sí. Le prometió a Dios que si su mujer regresaba él estaba dispuesto a volver a la iglesia.

Doctora: Esa depresión de ahora no es una mala noticia.

José: ¿Y eso?

Doctora: Cuando hay un duelo, por lo que sea, la muerte de un ser querido,  te despiden del trabajo, un divorcio, solemos pasar por cinco etapas antes de recuperarnos.

José: ¿Cuántas etapas ha pasado mi amigo?

Doctora: Cuatro. La primera es la negación, no quería reconocerlo; la segunda es la ira.

José: Cuando rompió las fotos.

Doctora: Ajá. La tercera es la negociación, en el caso de su amigo hablar con Dios para recuperar a la esposa.

José: Eso es importante porque empezó a reconocer que la había perdido.

Doctora: Así es. En México diríamos que ya le cayó el veinte. La cuarta etapa es la depresión.

José: ¿Y la quinta?

Doctora: La aceptación.

José: Doctora, no hay ningún amigo. Esta historia es mía y de mi esposa, exesposa casi, porque la semana que viene firmaré los papeles del  divorcio.

Doctora: Pues José, está usted a punto de terminar su duelo.  ¡Felicidades!

 

Vocabulario. Definiciones y ejemplos de uso

Enamorarse (de) Sentir amor (amor romántico) por alguien. ¡Ojo!, la preposición es de; no con

a) Muchos hombres se enamoraron de Cleopatra pero ella tal vez solo se enamoró de Marco Antonio.

b) Enamorarse es como estar mareado en la cubierta de un barco: tú te sientes morir y a los demás les da mucha risa.

Menos mal Expresa alivio ante una situación dada, por algo malo que no ha pasado o por algo bueno que sí ha pasado después de superar un cierto riesgo. Es más coloquial que “por suerte” o “afortunadamente” por las que a veces se puede sustituir. 

a) Esta mañana me he olvidado la cartera en casa. Menos mal que un compañero de la oficina me ha prestado dinero para comer.

b) Los Nats iban perdiendo 4 a 1 en la última entrada. Menos mal que Trea Turner hizo un grand slam y ganamos 5 a 4.

Rabia Sentimiento de gran enfado, enojo, frustración. Es más coloquial que ira o cólera. Se usa mucho con el verbo dar.

a) Me dio mucha rabia cuando mi padre me dijo que era perezoso. No es verdad, estudio muchas horas al día.

b) Los niños pasaron mucho tiempo haciendo un castillo de arena de en la playa. Les dio mucha rabia cuando una ola lo destruyó.

Ateo Alguien que no cree en Dios.

a) El director de cine Luis Buñuel usó una paradoja para definir su relación con Dios: soy ateo, gracias a Dios.

Duelo Dolor emocional, aflicción, que se experimenta después de una pérdida o un trauma.

a) Su padre murió hace poco y todavía no lo ha superado. Está en pleno duelo

b) Cuando se jubiló se hundió emocionalmente y entró en un largo periodo de Menos mal que ya lo ha superado.

Primero, segundo, tercero, cuarto, quinto Números ordinales. Se refieren a la posición en una serie. Primero y tercero pierden la “o” antes de un sustantivo masculino singular.

a) El primer presidente de Estados Unidos fue George Washington y el tercero Thomas Jefferson.

b) La segunda etapa del duelo es la ira, la cuarta es la depresión y la quinta la aceptación.

Caer el veinte Expresión mexicana. Ser, finalmente, consciente de algo. Reconocer, comprender, por fin, cual es la realidad de la situación. Suele usarse en pretérito.

El origen del modismo está en  la moneda de veinte céntimos que había que echar en el teléfono para hablar, hace muchos años, en las cabinas de teléfono públicas de México. Cuando caía la moneda de veinte céntimos, el teléfono daba línea y se oída el pitido, la señal. Es decir, se establecía la comunicación. Si te cae el veinte es que ya entendiste, ya se ha producido una conexión en tu cerebro y puedes reconocer la realidad.

a) El padre de Juan le dijo hace unos meses que no le daría más dinero si no sacaba buenas calificaciones. Ahora estudia ocho horas diarias porque sabe que su padre habla en serio. Ya le cayó el veinte.

b) Antonio iba a salir de casa para comprar el periódico cuando recordó que  su bebé recién nacido estaba durmiendo en la cuna. Ahí le cayó el veinte de que su vida había cambiado por completo.

Ex  Prefijo que se antepone a un sustantivo para indicar que es el antiguo o anterior.

a) Monté mi empresa hace varios años pero todavía veo a mis excompañeros de mi último trabajo.

b) Sé que el expresidente Bush vive en su rancho de Texas pero no sé dónde vive el expresidente  Carter

Estar a punto de + infinitivo La acción expresada por el infinitivo es inmediata, va a suceder muy pronto.

a) ¡Jorge está a punto de convertirse en socio de su bufete de abogados! Firmará la semana que viene.

 

Otros significados de algunas de estas palabras

Rabia Enfermedad de algunos animales que puede transmitirse al hombre, sobre todo por mordedura.

a) A Juan le mordió un perro el otro día. Menos mal que no tenía la rabia.

Duelo  Lucha o pelea entre dos personas o dos partes

a) En España en el siglo XIX todavía había duelos con pistola por cuestiones de honor.

b) El partido Real Madrid contra Barcelona es el gran duelo del fútbol mundial. 

(Dar, hacer) duelo Que causa dolor o sentimiento. Es la acepción más utilizada.

a) A Pedrito le hace mucho duelo despedirse de sus abuelos cuando vienen a visitarnos.

b) El año pasado los diez personas más ricas del país perdieron mucho dinero en la bolsa pero la verdad es que estos millonarios no me dan ningún duelo.

Ex Antigua pareja, esposo, novio o relación sentimental. Coloquial.

a) Es una situación difícil para María porque ve a su ex todos los días en la oficina. Son compañeros de trabajo.

Aquí tienen los ejercicios  

PES Intermediate 004 – El doctor del subjuntivo

Rafa, con acento español, ha ido al médico.  El médico le ha dicho que cambie varios de sus hábitos porque no son saludables. Se lo cuenta todo a Carmen, mexicana.

Teach yourself Italian (or Spanish)

Several months ago Lisa, one of my students, sent me this link Teach yourself Italian. If you click on it, you will be able to read an article from the New Yorker. The author is Jhumpa Lahiri,  a famous Indian-American writer that one day, being an adult, decided to learn another language, Italian. The New Yorker article turned out to be a chapter of a book with the title In other words, and was published a few months later.  Ms. Lahiri relates in her book her experience of learning Italian, the joys and the struggles, and does so writing her book in… Italian.

I love the article, the book and the author. Her experience reflects perfectly what 99% of all of us go through when trying to learn a second language. Her book is motivating because it is both the history of a success, and the recount of difficulties, doubts, hopes and wonders of learning a new language. It´s an inspiring book for people like us for several reasons: first you will learn how expectations fit into reality for a regular, common learner (like the author, like me, and surely like you), second you will learn to accept your pace and just enjoy the learning process through the years, (yes, many years), and third you must know that you will finally reach the proficient level only should you be stubborn enough. I am going to summarize Jhumpa Lahiri´s adventure, and I will add some experiences of my own, as a Spanish teacher and as a student of English as a Second Language.

The red pencil

Before going on with Ms. Lahiri and the “bellissimo italiano”, let´s talk a little bit about me and this article. When you read it, you will find that clearly it has been written by someone whose native language is not English, but you will find, hopefully, a good enough syntax and not a single grammar mistake or misspelling. I would like to say that´s all my merit, but it is not. After writing every article for this blog I give it to my English teacher, and she corrects it with her implacable red pencil. I cannot tell you enough the jolt of reality I receive every single time I see the paper full of red ink. In my defense, I can say that a few years ago, it was much worse, and that I am –all of us are- in the comforting company of Jhumpa Lahiri.

Ms. Lahiri moved to the USA when she was 2 years old. Her family is from the Indian part of the Bengali region. In spite of Bengali being her mother tongue she does not speak it or read it well. English is the language she has mastered. She has attained international success writing her books in English. Her work frequently shows Indian immigrants in the USA longing for integration, struggling with their goal of belonging. 

She was in her twenties when she decided to learn Italian. She bought a book called “Teach yourself Italian”, and began studying on her own. Soon she realized she was going to need help and hired a tutor. Several years passed. She had already become a successful writer in English with important awards and thousands of readers around the world. And her Italian? After a couple of teachers, periods of frenetic study combined with others of doing nothing, plus a couple of trips to Italy the result was that she was barely able to order a meal at a restaurant in Venice.  Does that sound familiar?

Viaggio in Italia

During her third trip to Italy, she told her Italian editors that she really wanted to learn the language. Immediately they stopped talking to her in English and began using only Italian. Our hero began speaking only in Italian while with them, making lots of mistakes, being corrected once and again, and having lots of fun and joy being immersed for the first time in her life in actual Italian. She refers to this chat with her editors as the turning point in her learning. She realized that there was no point in chatting in English about Italian, listening to her teachers talking in English about Italian grammar, and asking questions in English about her doubts about Italian. When she came back to the USA, she hired a new teacher and Italian was the only language spoken in their interaction. 

A short digression now. I would recommend you stop reading this article right now and go to the Blog in Spanish instead. Besides, you will find some exercises to practice there. Even better, go and listen to Podcast En Spanish. This article in English could help a little bit with your motivation, but that’s it. The main reason for me to write this blog in English it has nothing to do with students but with the damned red pencil. I am determined to eliminate %100 the red pencil from everything I write in English. ¡Sí se puede!

Only in Italian

At some point, Ms. Lahiri decided to move to Rome with her husband and children. Six months before moving she stopped reading in English and she only read in Italian. They arrived in Rome in the middle of August, when the city is a dessert. When they tried to enter the apartment they had rented the key did not work. Here it would fit perfectly and adaptation of an old joke by Woody Allen: not only is there no God but try to find a locksmith in Rome on Ferragosto -August 15th. It was not easy grasping the Italian language, but Jhumpa Lahiri was about to realize that she aimed not only to speak Italian but also to write a book in Italian about her experience learning the language. 

Little by little Ms. Lahiri began using Italian even in professional meetings, lectures. She understood that she had already succeed when she spoke at a conference in her babbling Italian and her words were translated to English. At some point, she began writing her book. Her teacher helped her with the first drafts. Her tutor told her the same things I am told by my teacher, and the same things I tell to my students: This sentence has Italian words but it´s English because you are using the English structure; we don’t say that in Italian; that sounds too formal, kind of unnatural, the colloquial way would be …, etc. And yes, lots of red ink everywhere. The second step was the reading of her Italian editors. Then she kept going rewriting. The book was taking shape.

To learn another language… become a sailor

It´s well known that there are two great classical writers in English whose mother tongue were other than English. I am going to refer briefly to them because the comparison with Ms. Lahiri seems unfair to me. Vladimir Nabokov (“Lolita”) was born into a wealthy family in St.  Petersburg. At the age of five, besides his native Russian, he already spoke French and English. Joseph Conrad (“Heart of darkness”, “Lord Jim”), besides his native Polish, learned French as a child. When he was 20 years old he joined the British Merchant Marine where he immersed himself for years in the daily use of English. No teachers are needed when you are on a ship surrounded by people who only speak the language you need to learn!

I have read In Other Words. The book has the original Italian on one side and the English translation on the other side. Ms. Lahiri did not translate the book into English. It is not a master piece like Nabokov´s “Lolita” or Conrad´s “Heart of Darkness”, but Lisa –my student- and I like it very much. Jhumpa Lahiri´s learning experience has much more to do with the regular student than with the two great writers aforementioned. She began in her twenties on her own, then maybe with a couple of hours of classes per week with long periods of doing nothing, then resuming classes, etc. Of course, moving to Italy was fundamental, but still you are around 40 years old trying to grasp a language that never has been yours.

In other words had good reviews in Italy -you can understand the sympathy her attempts would probably arouse there-, and skeptical reviews  in the United States. For me, her book is a phenomenal accomplishment per se, and I am sure her success reaching proficiency in Italian it is a personal milestone for her. You do not need to move to a Spanish speaking country to reach a good level of Spanish. You only need Juhmpa Lahiri´s passion and determination. Una donna coraggiosa e bravissima!

 

Spanish Tutor and Spanish Lessons in Washington DC